Fuente:
Recopilación de relatos, artículos de prensa y muchas entrevistas a vecinos efectuada por del Profesor y Dirigente Social Sr. Luis Ramos, investigador de la historia de nuestra comuna.
NUESTRAS POBLACIONES Y POBLADORES
La zona sur de Santiago fue, entre el 1959 y 1960, el epicentro de la política habitacional del gobierno de Alessandri. Así mientras en La Granja nacía la población San Gregorio (3.900 sitios, 20 mil habitantes) en La Cisterna y San Miguel, nacían las poblaciones José María Caro (9.000 sitios, 60 mil habitantes), Clara Estrella (1.417 sitios, 7 mil habitantes) y Santa Adriana (2.870 sitios, 15 mil habitantes). Es decir, estamos haciendo referencia a un proceso de asentamiento definitivo de santiaguinos que comprometía a más de 100.000 personas y que se verificaba, además, en un tiempo corto de no más de tres años, entre los años 1959 y 1962.
La población José María Caro
En el año 1959, llegada de la población.
Comienza así el nacimiento de la población “José María Caro, que estaría subdividida en seis sectores, del A al F, los cuales hasta el día de hoy se mantienen. En los sectores A y B fueron entregadas viviendas económicas de material sólido:
“La casita que me entregaron era de material sólido, eran dos piezas ... luego hicimos como auto construcción el living comedor”.
“Mi casa era de ladrillo, eran dos piezas bien buenas, no como las de los sectores más al sur que eran algunas de puro cholguán ... uno ya veía que se caían ...”
En los sectores C y D viviendas económicas de madera y en menor medida de material sólido.
“Cuando llegamos nos desilusionamos porque eran dos piezas de tabla, sin alcantarillado, sin luz, sin baño, había que ocupar un pozo séptico ...”
“... a nosotros en el sector D nos dieron dos piezas, pero de cholguán ...”
“recuerdo que eran dos piezas de madera, no tenían aleros ... y a la primera lluvia se mojó la puerta, se hinchó la madera y tuve que llamar a mi vecina para que me empujara la puerta para poder salir”.
En los sectores E y F, sólo se entregaron los sitios divididos con alambre púas, con una llave de agua potable.
El Pueblo de Lo Espejo
La ciudad de Santiago vivió una explosión urbana que tan sólo en 20 años, se impuso a la actividad agrícola de la zona. Algunos fundos desaparecieron y otros se fueron transformando en asentamientos industriales. La Estación Lo Espejo cerró definitivamente su servicio. Esto significó un estancamiento del Pueblo Lo Espejo, lo que se observa claramente en el deterioro de sus viviendas y la creciente subdivisión de los grandes sitios.
También la emigración de los descendientes de las familias locales desperfila al pueblo por muchos años, perdiéndose, entre otras cosas, gran parte de las celebraciones típicas.
La explosión demográfica de la ciudad de Santiago impacta directamente en el actual territorio de ‘Lo Espejo’, siendo entre los años 1959 y 1962, el período en que se inició la construcción y autoconstrucción de la mayoría de las actuales poblaciones.
El barrio Anita
Su nombre fue en honor a la hija del parlamentario: Pedro León Ugalde, dado que ayudó a que la Cooperativa se constituyera y lograra comprar los terrenos.
Una carta enviada al diario El Clarín, en el año 1970, se mencionan las gestiones de esta organización:
“La Cooperativa Tranviaria de Edificación Pedro León Ugalde Limitada, fue legalizada por decreto supremo Nº 929 del 7 de noviembre del año 1945 y contaba con 240 familias como socios.
Adquirió el predio denominado La Selva, hecho que se formaliza en el año 1947, luego se procedió a la subdivisión del terreno y esto fue aprobado por la municipalidad de La Cisterna en el año 1948”.
En el año 1954 el Ministerio de Obras Públicas solicitó modificar el plano por tener exceso de calles.
Desde el año 1956 y hasta 1960 se planificaron las calles con soleras y sarpas.
En el año 1961 se inició la instalación de la red de agua potable.
En el año 1963 se consiguió la postación eléctrica, para alumbrado público y domiciliario. Al año siguiente se logró el alcantarillado y al subsiguiente la pavimentación de las veredas.
Villa Gil de Castro
Celebraron su primer aniversario en la Villa Gil de Castro, las familias de los ex campamentos Calama y Venus. Los dirigentes recordaron que la solución comenzó a gestarse en julio del año 1998, durante una reunión de los vecinos con el alcalde y el Secretario Ejecutivo del Programa CHILE-BARRIO, donde se acordó el compromiso de entregarles departamentos en la Villa Gil de Castro, al año siguiente.
La población Fraternal Ferroviaria
La segunda población en crearse fue la “Fraternal Ferroviaria”, que corresponde a una Cooperativa de Empleados Ferroviarios, quienes adquieren partes de los terrenos del ex Fundo Lo Valledor, en el año 1950.
Cada uno se rascó con sus propias uñas para levantar sus viviendas mediante el sistema de autoconstrucción.
Lamentablemente la creación de la comuna de Lo Espejo no incorporó todo el territorio de la antigua Cooperativa, por lo que el grueso de su población hoy pertenece a la comuna Pedro Aguirre Cerda.
La población Lo Sierra
La urbanización significó el fin del fundo Lo Sierra. Primero se les dio a las calles nombres, de lugares y personas vinculadas a la historia política, social y cultural. Junto con la construcción de las nuevas casas, se colocaron otros nombres, de los dioses del Olimpo, planetas y estrellas. Entre estas calles con nombres nuevos y viejos, caminan cerca de 14 mil vecinos.
Lo Sierra A y B se caracterizó en sus inicios por la presencia de varios campamentos que obligaban a una vida muy sacrificada y de mucho sufrimiento diario.
Está dividida en sectores: A, B y C. El último sector en poblarse fue el A.
El sector B nació por la toma del fundo Lo Sierra durante el año 1972 por ochocientas familias sin casa que estaban organizadas en Comités. La mayoría provenía de Los Nogales, de la comuna de Estación Central. En principio la toma se denominó 26 de julio en recuerdo del Movimiento cubano que lleva el mismo nombre y que el 26 de julio del año 1953.
Sector A
Está compuesto por 36 blocks de departamentos. Los blocks son de tres pisos, en total son 432 viviendas, construidas en principio para funcionarios de las Fuerzas Armadas, pero por algún motivo el SERVIU, del Ministerio de Vivienda y Urbanismo optó por entregárselo a civiles postulantes de diferentes lugares de Santiago.
Esta forma de ocupamiento no fue casual, sino que respondió a la política del régimen militar de desarraigar a los ciudadanos de sus redes naturales, para mantenerlos desorganizados.
Sectores B y C
Se instaló en el sector C, el campamento Luis Emilio Recabarren, con una organización donde participaba toda la familia. Las mujeres, con poncho lo cuidaban. Algunos dirigentes sociales venían de otros sectores, de la José María Caro.
A diferencia del campamento anterior, aquí las familias postularon a sus viviendas por medio de cuotas.
Las viviendas de este sector en la actualidad se encuentran en malas condiciones, porque la gente aceptó soluciones de emergencia.
Colindante con a este mismo lugar y durante el año 1973, se realizó una segunda toma, en los terrenos vecinos al campamento de emergencia Luis Emilio Recabarren:
“En esta toma participaron 20 familias, algunas venían de Buseta, eran super achorados y nadie podía entrar. Se le puso el nombre de Chato Peredo. Este campamento se organizó en forma más militarizada, los guardias andaban armados, había que mostrar credenciales para poder ingresar, estaba rodeado de empalizada. Tanto esfuerzo se entendía porque había que defender los terrenos para que no ingresaran los delincuentes”.
La población Los Lebreles
Varios años después, se construyó otro conjunto habitacional: Los Lebreles, en el mismo sitio donde funcionaron los buses-aulas de la escuela municipal que en la actualidad lleva por nombre de Hernán Olguín. En el año 1992, este conjunto fue entregado e inaugurado por el Ministro de Vivienda de aquel entonces, don Alberto Etchegaray.
La población Lo Valledor Sur
Esta es la población que heredó el nombre del antiguo fundo de la zona.
Los terrenos fueron entregados por la CORVI y la construcción se realizó a través de dos sistemas: autoconstrucción y construcción íntegra por parte de CORVI. Algunas familias venían de la población Colo Colo, a orillas del Río Mapocho, que arrastró sus casas durante temporales en el año 1957.
La construcción fue seguida atentamente por los pobladores organizados, que incluso realizaron un paro contra la empresa constructora, porque usaba materiales de mala calidad.
La población Ampliación Villa Sur
Este es un pequeño sector de la comuna, tiene forma de triángulo y allí viven poco menos de 500 vecinos. El resto de la histórica Villa Sur, y que es la gran mayoría, hoy pertenece a la comuna vecina: PAC. Como dicen los antiguos habitantes de Villa Sur, las casas parecían cajas de fósforos, y no tenían los actuales techos. Recién cuando se instaló el agua y la luz, se empezó a cortar el pasto de un metro de alto que rodeaba las casas.
La población Santa Adriana
La urbanización de la ex Chacra Santa Adriana fue parte del Plan Habitacional, organizado y coordinado por la CORVI, que buscaba ampliar la cobertura de construcción de viviendas económicas, de modo semejante a la población José María Caro. Sin embargo, antes que concluyeran los trabajos de urbanización, la noche del 22 de julio del año 1961, un grupo de unas 1.200 personas invadieron los terrenos de la ex Chacra Santa Adriana.
En la historia de la población Santa Adriana, debemos reconocer varios capítulos, entre los cuales la toma es el más expresivo y el que más llamó la atención del público y la prensa. Sin embargo, con anterioridad a la toma del 22 de julio del año 1961, un grupo de pobladores, provenientes de la población Germán Riesco, ya había sido instalado por la CORVI en Santa Adriana. Por otra parte, como veremos más en detalle, los protagonistas de la toma no pudieron permanecer en Santa Adriana, de tal modo que luego de dilatadas negociaciones, fueron trasladados al sector de San Rafael, en la zona sur de Santiago. Finalmente, en la medida que se logró esta solución, la CORVI, pudo terminar de instalar a sus postulantes regulares en la disputada chacra de Santa Adriana.
La población Clara Estrella
Estos terrenos fueron de la chacra Clara Estrella y se usaron para la agricultura hasta poco antes que se instalara la población que conservó el nombre.
Las calles de Clara Estrella con sus nombres geográficos, nos invitan a pasear por distintas ciudades del país, de norte a sur.
“Por Panamericana pasaba un canal del cual supuestamente se extraía agua para regadío ..., estaba cercado por zarzamoras y en la vera había un camino de tierra que en el invierno se convertía en un lodazal, al otro lado se extendía un bosque de eucaliptos cercado por un muro de adobes.
Esta población fue levantada en gran parte por sus propios vecinos, en un proyecto de autoconstrucción impulsado por la CORVI que vendió a las Cooperativas los terrenos de la chacra Clara Estrella.
Fue la segunda experiencia de autoconstrucción en Chile, de tipo experimental. La primera había sido la población Germán Riesco.
La participación de la CORVI consistía en prestar asesoría técnica, facilitar herramientas y abastecimiento de materiales, con los recursos de la Alianza para el Progreso. Todas las herramientas utilizadas (palas, chuzos, martillos) eran de procedencia norteamericana.
La población Santa Olga
Por su copa de agua y sus calles, podemos recordar ciudades y personajes de México y su cultura. Por allí cruzan apresurados 120 mil habitantes, muchos de ellos protagonistas de la película chilena: Caluga o menta, un buen registro de las historias juveniles de este sector.
Allí estuvo localizada una casa patronal del fundo Lo Sierra, que fue destruida por los terremotos de marzo del año 1985, lo que obligó a demolerla.
En el año 1968 los técnicos de la CORVI trazaron los sitios, sin pavimento, agua potable ni luz eléctrica. Sólo había unos grifos y llaves en algunas esquinas.
La población Villa Nueva Lo Espejo
Los nombres de las calles de este sector son un repertorio interminable de poetas y poetizas, escritores y escritoras de Chile y el mundo. Aquí transcurre la vida de casi 14 mil habitantes.
Hacia este lugar llegaron numerosas familias del Pueblo de Lo Espejo organizados en el Comité Lo Espejo, entre ellos muchos allegados y arrendatarios. Los que viven entre las calles Gabriela Mistral y Nueve de enero, llegaron organizados en diferentes campamentos, como por ejemplo; el Venceremos, Vencimos y Las Acacias, que era uno de los grandes. En un momento se llegaron a unir diez Comités del sector.
Las Turbinas: De campamento a población
El nombre de este sector proviene del antiguo fundo Las Turbinas, que existió desde el año 1930. Aquí habitan alrededor de 400 familias, aledañas al canal del mismo nombre, que cruza el sector de sur a norte.
Junto a él se levantó el campamento con el mismo nombre con habitantes que dejaron los sitios eriazos ubicados a orillas de Américo Vespucio. Se trataba de familias que no habían logrado conseguir departamentos en los bloques que se construyeron en el año 1985.
Condominio Lo Espejo
Se frmó con la radicación de una parte del campamento Vista Hermosa. Treinta familias favorecidas por el programa de “Un Techo para Chile”. Tienen 63 metros cuadrados gracias al subsidio aportado por el Fondo Solidario de Vivienda que les entregó 513 UF, en tanto que uno de los ejes señalados en la nueva política impulsada por el Gobierno de la Presidente Bachelet señala que deben permanecer en la comuna de origen. Está ubicada al costado de la Tenencia Lo Sierra, y sus casas fueron diseñadas según los lineamientos sugeridos por los mismos beneficiarios
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1 comentario:
Hola! aún existe alguien vigente en la cuenta? tengo unas consultas que hacer
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